Imagen de la reunión de trabajo en la sede del consejo regulador prieguense. (Foto: Antonio J. Sobrados) (Foto: Cedida)

Con la intención de analizar y aportar iniciativas para mejorar la situación actual del sector del olivar, la sede del marco oleícola prieguense ha acogido una reunión de trabajo, sin un orden definido, en la que han tomado parte la directora general de Industria y Calidad Agroalimentaria, Ana Romero; el delegado provincial de Agricultura, Francisco Zurera; y miembros del consejo regulador de la D.O.P. “Priego de Córdoba”, encabezados por su presidente, Francisco Serrano.

Aspectos como los precios, la calidad, el almacenamiento privado o las características de la comarca prieguense y su situación, fueron expuestos por Francisco Serrano, apostando por acometer iniciativas conjuntas que mejoren la rentabilidad de los agricultores de la zona, al tratarse de una comarca donde predomina el olivar de montaña.
Unas propuestas que según Serrano, deben favorecer la mejora de la renta de los agricultores de una zona como la comarca de Priego de Córdoba, en la que la recogida de la aceituna, conlleva un coste añadido, por su orografía.
Ana Romero destacó las excelencias de los caldos producidos en la zona y los reconocimientos obtenidos a todos los niveles, haciendo alusión a la aprobación en el Parlamento de la Ley de Calidad Agroalimentaria, que va a posibilitar diferenciar este tipo de producciones al consumidor, y a la vez conseguir lo que se está demandando desde el sector, en relación a un mayor beneficio empresarial y de la renta del agricultor, así como dar una mayor transparencia y confianza al consumidor final.
De igual manera, Romero incidió en dotar al aceite de oliva de un valor añadido, que repercuta en una mayor presencia en los mercados, “y vender a un buen precio”.
Hacer una puesta en común y enriquecerse de las aportaciones de ambas partes ha sido el eje principal de esta reunión de trabajo, en la que Francisco Zurera destacó la necesidad de trabajar conjuntamente para salir de la situación actual que atraviesa el sector oleícola.
El delegado de Agricultura incidió en la necesaria subida del precio del aceite para hacer rentables las explotaciones agrarias, a pesar de que le sector “ha hecho sus deberes”. Zurera apostó por regular los mercados y favorecer el almacenamiento privado, ante la “convulsión de los precios”