Vista del centro penitenciario. (Foto: Cedida.)

La organización sindical CSIF Prisiones Córdoba ha expresado su firme condena a los graves incidentes que ocurrieron este martes en el Centro Penitenciario de Alcolea protagonizado por un grupo de internos y que se saldaron con un trabajador que sufrió heridas que requirieron atención médica en un hospital de Córdoba. El sindicato vuelve a reiterar la necesidad de que al personal penitenciario tenga la consideración de agentes de la autoridad y que reciban una formación continua y actualizada, así como los medios materiales adecuados de protección.

Según CSIF, los hechos se iniciaron sobre las 18.00 h. cuando en el patio del módulo 5 se produjo una agresión de dos internos a otro que le causaron diversas lesiones hasta que los funcionarios los separaron de manera inmediata. Los reclusos que realizaron el ataque fueron trasladados al módulo de aislamiento, mientras que el herido fue llevado a Enfermería y, posteriormente, al módulo de aislamiento.

A continuación, otros cuatro internos, aprovechando este incidente, intentaron iniciar un motín con el resto de la población reclusa del citado módulo gritando frases como “vamos a llevarnos a estos hijos de puta por delante” o “venid por nosotros, perras”.

Al mismo tiempo, los cuatro internos golpearon las puertas acristaladas de los rastrillos, se intercambiaron ropa para dificultar su identificación e insultaron y lanzaron golpes y patadas a los trabajadores allí presentes. Asimismo, animaron a los otros internos a sumarse al intento de motín con expresiones como “no os quedéis quietos, vamos a reventar esto” o “de aquí no sale nadie. De esta esta no se salva nadie”.

CSIF señala que este incidente finalmente fue resuelto gracias a la labor profesional de varios funcionarios. Durante la intervención uno de los trabajadores resultó lesionado, requiriendo primero atención en la Enfermería del centro y más tarde en un hospital de la capital.

Ante estos hechos, el sindicato reclama a la Dirección de la Prisión el traslado inmediato de los internos que protagonizaron el incidente y critica a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias por “su política buenista que deriva en una clasificación interior a todas luces desacertada”.