Según el Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España 2024, cuya presentación ha tenido lugar este miércoles en el Auditorio Jorge Semprún del Ministerio de Cultura y que ha sido clausurada por el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, el 70,3 % de la población de nuestro país reconoce haber leído por trabajo o estudios a lo largo del pasado año. Por primera vez, los lectores por ocio superan el 65% de la población (65,5 %). Además, se mantiene el porcentaje de lectores frecuentes por encima del 50 %, lo que supone que más de la mitad de la población lee con una frecuencia, al menos, semanal.
El informe elaborado por Conecta para la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), con el patrocinio de CEDRO y en colaboración con el Ministerio de Cultura, apunta que desde el 2017, el porcentaje de población que dice leer por ocio se ha incrementado en 5,8 puntos porcentuales, mientras que el de lectores frecuentes se incrementó en 3,5 puntos porcentuales.
El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha clausurado la presentación del estudio destacando que "un año más constatamos, con datos en la mano, que el hábito lector en la sociedad española se arraiga y crece, tendencia que se viene consolidando en los últimos ejercicios. Es un triunfo colectivo, como sociedad, del que este Ministerio de Cultura se siente parte activa y orgullosamente responsable".
A su vez, dado que las franjas de población que aducen falta de tiempo para leer son las de población en edad de trabajar, el ministro ha señalado la necesidad de "reducir la jornada laboral, algo que nos da la oportunidad también de ganar en cultura y ganar tiempo para la lectura". Y ha concluido exponiendo que "la lectura es, por ello, un acto puro de libertad y su defensa es imprescindible. Asunto de Estado, asunto personal y asunto de la humanidad, al mismo tiempo".
El Barómetro refleja otros aspectos relevantes sobre el hábito lector en España como son las importantes diferencias existentes entre sexos, tramos de edad, niveles educativos y distribución geográfica. De tal manera que, a grandes rasgos, el perfil del lector tipo en nuestro país sería una “mujer joven con estudios universitarios que vive en un ámbito urbano”.
Más en detalle, según este estudio, en 2024 creció el porcentaje de mujeres que lee en su tiempo libre situándose en el 71,7 % del total. Supera, además, a los hombres en todos los tramos de edad y se incrementa la distancia registrada entre ambos sexos en el último barómetro (12,7 puntos porcentuales frente a 9,3 puntos en 2023).
Además, el estudio contribuye a romper uno de los falsos mitos que persisten en nuestra sociedad que afirma que los jóvenes no leen. Según los datos del Barómetro, por edades, la población entre 15 y 24 años sigue siendo la más lectora de nuestro país, alcanzando el 75,3 % del total en ese tramo de edad.
Desde 2017 se ha producido un incremento de 10,6 puntos porcentuales en los índices de lectura de esta población. Estas cifras parecen reflejar el efecto de la incorporación a estos tramos de edad de las generaciones de niños y niñas que fueron accediendo a la enseñanza y, en ella, adquirieron el hábito lector.
En cuanto a la distribución geográfica por CC.AA. seis comunidades se encuentran por encima de la media nacional respecto al porcentaje de lectores en tiempo libre: Madrid (72,1 %), País Vasco (69,4 %), Cataluña (68,9 %), Navarra (68,2 %); La Rioja (67,3 %) y Galicia (66,2 %). En el extremo opuesto se sitúan Extremadura (56,7 %), Canarias (60,5 %) y Cantabria (61 %), las comunidades con menos lectores.
la falta de tiempo sigue siendo el principal argumento para aquellos que no leen o leen de manera ocasional. Casi cinco de cada diez personas así lo reconocen.
Un 27 %, por su parte, afirman preferir emplear su tiempo en otros entretenimientos. El 25% de los no lectores directamente apuntan que tienen falta de interés por la lectura.
Lectura en soporte digital y audiolibros
A diferencia de lo ocurrido en años anteriores, el Barómetro de Hábitos de Lectura 2024 refleja un nuevo crecimiento de los lectores en formato digital tras unos años de estancamiento. Se incrementa hasta el 31,7 % de la población. El E-reader (12,7 %), el ordenador (11,1 %) y el móvil (10,9 %), que también vuelve a crecer tras el estancamiento registrado en años anteriores, son los dispositivos más utilizados para la lectura de libros digitales.
En cuanto a la forma en la que obtuvieron los libros digitales, cerca de un 40 % (39,1 %) señaló que los bajó/descargó pagando, lo que supone un incremento con respecto al año anterior y casi 10 puntos desde 2017. El 61,5 % afirmó que se los bajó/descargó gratuitamente de Internet. El 65,9 % de los entrevistados para la elaboración del Barómetro que se descargan libros electrónicos gratuitamente afirmaron saber perfectamente cuando la descarga no es legal. Sigue incrementándose el porcentaje de usuarios de audiolibros, que ya se sitúan en el 7,9 % de la población mayor de 14 años, con una mayor proporción entre los más jóvenes.
Compra de libros
Con respecto a la compra de libros, el porcentaje de la población española que adquirió alguno (no de texto) a lo largo de 2024 se situó en el 53,8 %. Desde 2017, el porcentaje de compradores se ha incrementado en 6,5 puntos porcentuales.
La librería tradicional sigue siendo el principal canal de compra de libros no de texto (44 % en 2024) elegido por los españoles, seguida de internet (26% en 2024) y de las cadenas de librerías (13% en 2024).
Bibliotecas
La asistencia a las bibliotecas se resintió durante la pandemia con un descenso en el número de usuarios como consecuencia de las restricciones. Esta caída no se ha recuperado, si bien en los últimos años se ha ido incrementando. El 28,8 % acudió a estas instituciones. Lo que también sigue creciendo es la valoración que le otorgan los usuarios, que se sitúa en una nota media de 8,3, un notable alto.