Exterior del hospital comarcal Infanta Margarita. (Foto: R. Cobo)

El Sindicato de Enfermería, SATSE, en Córdoba vuelve a alzar la voz ante la alarmante situación que vive el Hospital Infanta Margarita de Cabra por el déficit de plantilla de enfermeras.

Según explica el sindicato, la ausencia de contrataciones durante la primera quincena de mayo, cuando sí se estaban ofertando contratos en otros hospitales andaluces, ha llevado a las enfermeras a levantar la voz a través del portavoz de SATSE en Córdoba, Francisco Quintero, quien asegura que, a día de hoy, falta personal, y los contratos llegan tarde y en número insuficiente, lo que agrava aún más un problema estructural de déficit de plantilla ya histórico, y sobre el que desde el Sindicato de Enfermería lleva trabajando desde hace más de cinco años.

SATSE denuncia que las condiciones laborales actuales son insostenibles y explica que en muchas unidades, especialmente en la tercera y cuarta planta de hospitalización, las enfermeras tienen que hacerse cargo de hasta 32 pacientes por turno, con tan solo dos profesionales en horario de tarde y noche. Esta ratio no solo pone en peligro la seguridad del paciente, sino que sobrecarga a unas profesionales ya exhaustas, expuestas a jornadas interminables, turnos rotativos sin planificación y una presión emocional extrema.

Problemas de conciliación
SATSE alerta de un problema que trasciende lo laboral: la absoluta imposibilidad de conciliar la vida personal y profesional. Los turnos, según explica, se modifican de un día para otro, sin previo aviso y sin respetar los tiempos de descanso, para cubrir vacantes derivadas de bajas o reducciones de jornada sin cubrir. Las enfermeras viven permanentemente pendientes del teléfono o del grupo de WhatsApp de la planta, esperando instrucciones de última hora que impiden cualquier tipo de planificación familiar o personal.

"La rotación constante de turnos, con jornadas que pueden llegar incluso a las 17 horas, está generando un impacto devastador en la salud de las enfermeras. No descansan adecuadamente, no pueden organizar su vida fuera del hospital y se enfrentan a un agotamiento físico y mental que repercute también en la atención al paciente. Esto convierte la conciliación entre la vida laboral y familiar en una tarea no ya titánica, sino imposible", según Francisco Quintero.

La sobrecarga laboral también genera situaciones absurdas: enfermeras que, tras un turno maratoniano, deben ingresar, preparar y atender a pacientes quirúrgicos sin apenas recursos humanos. Este nivel de exigencia, según el sindicato, es incompatible con la calidad asistencial que merecen los pacientes y con la dignidad profesional que exigimos desde SATSE para nuestras compañeras.

SATSE afirma que la Dirección del Servicio Andaluz de Salud continúa haciendo oídos sordos a las múltiples denuncias realizadas por SATSE. El sindicato lleva tiempo reclamando la creación de una estructura mínima de tres enfermeras por turno en todas las unidades del hospital, todos los días de la semana. Sin embargo, las peticiones caen en saco roto, y los efectos de trabajar sin los recursos suficientes recaen directamente sobre los pacientes y los profesionales.

Quintero insiste en que la gestión, no solo no soluciona el problema, sino que lo perpetúa. No hay sustituciones, no hay refuerzos, y la insuficiente plantilla fija no puede más. Esta dejadez institucional está llevando a muchas profesionales al borde del colapso físico, emocional y al abandono profesional.

Soluciones inmediatas
SATSE exige al SAS que actúe con urgencia. En su opinión, no se puede seguir ignorando el deterioro de las condiciones laborales ni el impacto que esto tiene sobre la salud del personal y la calidad de la atención sanitaria. Es imprescindible contratar de inmediato a más enfermeras, estabilizar los turnos y garantizar un mínimo de descanso entre jornadas.

Por último, el sindicato destaca que la salud de quienes cuidan también importa. No se va a permitir que la precariedad se normalice y se seguirá alzando la voz hasta que se adopten medidas reales y efectivas, que pasan sin duda por un aumento de la plantilla, algo que se ha trasladado a la Dirección Gerencia del Área Sanitaria.