Suelo leer la prensa digital a diario, pues solo en ella puedo dejar algún comentario al hilo de cualquier noticia que me interese.

Lo que voy a contar no es nada fruto de mi imaginación. Es el relato de algo que ocurrió tal como lo cuento.
Me apresuro a decir que nunca he maltratado a ningún animal. Soy canaricultor y Paco (mi perro) es uno más en la familia.
Este verano pasado, leyendo el diario Córdoba, en su versión digital, llamó mi atención la noticia de que el narcotraficante, jefe del gallego clan de los Charlines, había sido puesto en libertad trece años antes de cumplir su condena. Según el periódico se había beneficiado de no sé qué historia penitenciaria (donde hay mucho dinero hay mucha bendición) y este criminal salió de prisión trece años antes de cumplir el total de su condena. Como es normal puse mi correspondiente comentario a tan lamentable noticia.
Continuando con mi lectura, otra noticia llamó mi atención. Policía o Guardia Civil (ahora mismo no lo recuerdo) habían incautado de un alijo de 140 kilos de cocaína. De nuevo puse mi comentario de felicitación a las Fuerzas del Orden por tan magnifica actuación, y alguna que otra cosilla diría que ahora no recuerdo.
Bueno, pues siguiendo con mi lectura, veo en otra pagina que en el barrio de la Judería de Córdoba, el empleado de un establecimiento había golpeado a un gato con un palo. Una turista granadina puso una muy merecida denuncia al agresor del maltratado felino. También escribí otro comentario.
Días después supe que a la denunciante de la agresión al gato, a punto estuvieron de hacerla heroína nacional.
Esto que relato aconteció por la mañana. Llegada la noche tuve la curiosidad de mirar las noticias mencionadas para ver qué comentarios habían puesto. Y, como no, sentía curiosidad por conocer el parte de lesiones del gato.
Mi capacidad de sorpresa creo que ya debe estar casi completa. Pero cuento lo que leí.  La noticia de la libertad prematura del narcotraficante, tenía, además de mi comentario, otro más.
La incautación de los 140 kilos de cocaína, solo tenía el comentario que esa mañana yo había dejado.
Preso, ya, de la curiosidad, busqué la noticia del gatuno apaleo. Llamó poderosamente mi atención que ésta tuviese la nada despreciable cantidad de 23 (veintitrés) comentarios.
Si alguien espera que saque una moraleja se va a quedar con las ganas.
Juzguen ustedes mismos. 
Y por favor no olviden:
Si ves a un adolescente que se droga, AYÚDALO.
Si conoces a un vendedor de drogas, DENÚNCIALO.


(*) Presidente de la asociación contra la droga "CLARA MARIA" de Priego y aldeas.