Francisco Parra, enfermero de la ZBS de Priego. (Foto: R. Cobo)

Considerar y equiparar los exámenes MIR y EIR a las oposiciones de acceso a las administraciones públicas para adquirir una plaza o puesto de trabajo en propiedad y aplicar una jubilación progresiva a los profesionales de la sanidad que permita la incorporación de jóvenes y evite con ello la escasez de personal en las plantillas.

Estas son las dos propuestas que Francisco Parra, enfermero del consultorio de Carcabuey, ha dirigido mediante un escrito a la Ministra de Sanidad, Mónica García, con las que pretende, “hacer justicia con los jóvenes por su mérito académico y con los mayores por su desempeño profesional durante décadas”, a la par que las mismas, repercutan en aumentar y estabilizar las plantillas del Sistema Nacional de Sanidad.

Así lo indicaba a Priego Digital el propio Francisco Parra, que destacaba la “complejidad y trascendencia” de las pruebas MIR para medicina, y EIR, en el caso de enfermería, destacando que la propuesta que plantea de que ambos exámenes sean reconocidos como una oposición de acceso a la administración, “supondrían un gran estímulo y garantía para estos profesionales”.

Por otra parte, en el escrito que Parra ha dirigido a la Ministra del ramo, también se contempla una jubilación escalonada programada para los profesionales de mayor edad de la medicina y la enfermería, ofreciendo ese tiempo de trabajo a jóvenes profesionales, evitando con ello la escasez de plantillas.

Como señalaba Francisco Parra, junto al escrito dirigido a la Ministra también ha dirigido uno a los alcaldes de la Zona Básica de Salud de Priego, para que se adhieran a las propuestas planteadas por este profesional de la enfermería con más de 39 años cotizados, e igualmente las trasladen a sus respectivos partidos, que en el caso del PP y PSOE, han sido en Andalucía los encargados de la gestión de la Sanidad.

Por otra parte y en relación a la concentraciones y protestas que se vienen produciendo por la situación de la Atención Primaria, Parra destacaba que, “son el reflejo de la realidad que tenemos, que no es, para nada nueva”.