Paula Bueno, en un partido de la ya finalizada temporada en Superdivisión femenina. (Foto: Cedida) (Foto: Cedida)

El equipo femenino del CajaSur Priego continuará un año más en la máxima categoría del tenis de mesa nacional, al concluir la Superdivisión en la octava plaza de la clasificación general, tras la disputa este pasado fin de semana de la última jornada.

El equipo prieguense cierra una temporada un tanto accidentada, por la marcha de la asiática Ying Wang y de la rumana Camelia Postoaca, lo que obligó al club a echar mano de la cantera hasta la finalización del campeonato.
El balance de club prieguense se puede catalogar de positivo, gracias en parte a la actuación de las jugadoras nacionales, que tuvieron que echarse el equipo a las espaldas cuando la competición se encontraba en su punto álgido.
El CajaSur Priego ha cerrado la presente campaña liguera con un balance de 8 victorias y 14 derrotas, sumando un total de 16 puntos, que le valen para situarse en la mitad de la tabla y no pasar apuros en la recta final de la liga, manteniendo la categoría.
El equipo inició su andadura con la tripleta formada por Ying Wang, la rumana Camelia Postoaca y la nacional Paula Bueno, logrando importantes victorias, como la conseguida ante el campeón de liga, el UCAM de Cartagena.
A partir de la décimo tercera jornada, Belén Henares y Natalia Leña sustituyeron de manera alternativa a la asiática Wang, y el CajaSur perdió potencial, que se vio aún más mermado tras la marcha de Postoaca, y la incorporación de Laura García.
En la última jornada, celebrada este pasado fin de semana, el CajaSur Priego cerró la Superdivisión con una derrota por 0-4 ante el Balaguer, que deja a las prieguenses en la octava posición de la tabla, y las miras puestas ya en lo que será la planificación de la próxima campaña.