Con el inicio de la Cuaresma, la actividad de las cofradías y hermandades prieguenses se vuelve frenética, de manera especial durante estos primeros días en los que, junto a los cultos que se iniciaba el pasado Miércoles de Ceniza, hoy viernes se abren la mayoría de los ya tradicionales “cuartelillos”.

En concreto, en esta ocasión serán seis los que abrirán sus puertas, convirtiéndose en un punto de obligado encuentro tanto para los cofrades como para el público en general, algunos durante un solo fin de semana y otros, la mayoría, durante toda la Cuaresma.
Así, hoy se inauguran de manera oficial los cuartelillos de La Pollinica, Dolores, Mayor Dolor y Angustias, mientras que La Paz y La Caridad lo harán la próxima semana.
En el caso de La Pollinica, su casa hermandad, ubicada en la calle San Pedro Alcántara, será una vez más el marco elegido para su celebración, hoy viernes y mañana sábado, contándose mañana con la intervención de Antonio Aguilera Jiménez, hermano mayor de la Caridad, que a partir de las 21:00 horas ofrecerá una charla.
También hoy abre sus puertas, en este caso en el local existente junto a la ermita de El Calvario, el cuartelillo de la cofradía de Los Dolores, que a excepción del Viernes de Dolores, abrirá sus puertas todos los viernes y sábado.
Con una novedad con respecto a ediciones anteriores, el Mayor Dolor también inaugura hoy viernes su cuartel, en este caso a escasos metros de su sede canónica, en concreto en el local del antiguo Bar Pasaje, en la calle Cava. Igualmente, la archicofradía de Las Angustias inaugura hoy su cuartelillo, en el local de la hermandad emplazado en la calle Enmedio Palenque, permaneciendo abierto hasta el 23 de marzo.
El próximo fin de semana iniciará su cuartel la hermandad de La Paz, en su local de las Caracolas, abriendo también todos los viernes y sábados de Cuaresma, mientras que la hermandad de La Caridad hará también lo propio durante los tres primeros fines de semana del mes de marzo en su local de la calle Piloncillo.
Por el momento estas son las seis hermandades prieguenses que abrirán sus cuartelillos, en los que como es tradicional los precios populares y las suculentas comidas caseras serán un reclamo más que justificado para realizar una visita a los mismos.