OCIO/ESPECTÁCULOS | Música
Un concierto solidario de altísima calidad interpretativa
La Banda Sinfónica Soledad Coronada, dirigida por Juan Luis Expósito, ofrecía el pasado sábado y anual concierto de Santa Cecilia, este año con fines solidarios
Lunes 2 de diciembre de 2013 - 12:07
Los prieguenses en general y el mundo cofrade en particular volvieron a demostrar el pasado sábado su espíritu solidario, con una elevada asistencia al concierto que la Banda Sinfónica Soledad Coronada ofreció en el Teatro Victoria.
Y es que pese a la puesta en marcha durante el fin de semana de distintas campañas de recogida de alimentos, fueron muchos los que aportaron su granito de arena a esta iniciativa impulsada por la Real Cofradía y Hermandad del Santo Entierro de Cristo y María Stma. de la Soledad Coronada, en la que se recogieron una gran cantidad de alimentos no perecederos que esa misma noche fueron entregados a Cruz Roja, entidad encargada de su distribución.
En lo que al concierto en sí se refiere, cabe reseñar lo atractivo del repertorio, toda vez que al ser una formación surgida en el seno de una cofradía y por tanto con una trayectoria estrechamente relacionada con la música cofrade, destacaban en el programa que presentaba la joven formación, varias piezas contemporáneas de los géneros más variados, como ya ocurriera el pasado año, volviendo este sábado a evidenciar la gran calidad de esta banda y de manera especial de alguno de sus integrantes.
En este sentido cabe reseñar dos piezas dentro del repertorio interpretado por la Banda Sinfónica Soledad Coronada, en concreto Tengo, tengo, tango de J. F. Muñoz Valls y el Concierto nº 1 para Clarinete y Banda de Óscar Navarro, en el que actuaron como solistas Antonio Cobo Peregrina y Miguel Hidalgo Ordóñez, respectivamente.
En cuanto al resto de obras que conformaban el programa, éste se abría con la marcha cofrade La Soledad, de Pedro Morales, a la que siguió el pasodoble Música i Poble, de Ferrer Ferrán, completándose con la espectacular Primera Suite para Banda de Alfred Reed, en la que sobresalió la amplia sección de metales que la Banda presentaba esa noche.
Como regalo para el público asistente, la formación, dirigida por Juan Luis Expósito, interpretó otra pieza cumbre de la música contemporánea como es el Bolero de Maurice Ravel, con el que se ponía un brillante colofón a un concierto de altísima calidad, interpretativa e igualmente, solidarias, por los fines que éste perseguía.