Alrededor de 120 niños y niñas de Educación Infantil, Primaria y Secundaria de la comarca de Priego se han beneficiado del servicio de Guardería Temporera, que comenzó a finales del mes de noviembre del pasado año y se clausuraba hoy jueves en el Colegio Ángel Carrillo.
Este servicio, que mantiene el Consistorio prieguense, ha posibilitado a muchas familias desempeñar con total normalidad las tareas agrícolas durante la campaña olivarera, atendiendo a sus pequeños en las sedes de Priego, ubicadas en los colegios Ángel Carrillo, Cristóbal Luque Onieva y Virgen de la Cabeza, así como en las sedes de las aldeas de Las Lagunillas y Zamoranos; y la ELA de Castil de Campos.
Para optimizar los recursos, el servicio daba comienzo el 25 de noviembre en Priego y Zamoranos, donde la recolección comienza antes, mientras que en Lagunillas y Castil de Campos el dispositivo se iniciaba el 10 de diciembre, finalizando en Zamoranos y Castil de Campos el 15 de marzo, en Priego el 31 de marzo, mientras que Lagunillas ha sido la última aldea en la que se ha finalizado la prestación, en concreto hoy jueves.
Para atender este servicio, el Consistorio ha contratado a 8 personas, un coordinador, 5 auxiliares de puericultura, 3 de ellas en aldeas y otras 2 en Priego, donde además se contrató a una cocinera y una limpiadora, ya que durante los fines de semana y festivos el servicio de comedor se prestaba en el colegio Ángel Carrillo
Un servicio que como apuntaba a Priego Digital la Alcaldesa prieguense en los prolegómenos de la clausura, “supone un importante esfuerzo económico para el Ayuntamiento”, recordando que existen localidades de similares características a Priego, como Alcalá la Real o Baena, “municipios agrícolas que ya suspendieron este servicio ya que no existe subvención por parte de la Junta, por lo son los Ayuntamientos los que tenemos que asumir todo su coste”, que en el caso de Priego, como añadía Ceballos, ronda los 100.000 euros. Aún así, la Alcaldesa incidía en la necesidad de ofrecer este servicio de guardería temporera, “no sólo por la ayuda que supone a los padres durante la campaña olivarera, sino por la labor social que el programa incluye, de manera especial en los niños de las aldeas”.
Así, una merienda en el colegio ángel Carrillo, en la que han tomado para padres, alumnos, trabajadores y representantes de la Corporación municipal prieguense, clausuraba esta tarde este servicio.