El cambio de emplazamiento del botellón y el retorno del concurso de trovos a su fecha tradicional de celebración son las principales novedades de la Feria Real 2018 de Priego, cuya programación y cartel anunciador, realizado por Lina Reyes, eran presentados esta mañana por la concejal de Festejos, Paqui Mantas, y el responsable de la delegación de Seguridad, Toni Musachs.
Una programación en la que se seguirán potenciando los espectáculos en la Caseta Municipal, tanto en horario vespertino como particularmente durante la noche, contándose para ello con la presencia de orquestas y artistas “de primer nivel”, como así apuntaba Mantas.
La edil, que indicaba que se cuenta con un presupuesto total de 63.000 euros para la organización de la Feria Real, ponía de relieve el trabajo que supone, con esa cantidad, cerrar un programa de seis noches y cinco días, “lleno de actividades para todos los gustos y edades”.
Programa que tendrá un anticipo en los días previos, como es el caso de la trigésimo sexta edición del Festival Flamenco, cuya celebración está prevista para el sábado 25 de agosto en la Fuente del Rey, mientras que el miércoles 29 tendrá lugar la tradicional visita de la Corporación a las residencias de mayores de la localidad, contándose en esta ocasión con la participación de Ana Jiménez.
En cuanto a los días de feria propiamente dichos, la programación vuelve a girar en torno a las actuaciones programadas en la caseta municipal, tanto en horario de tarde como de noche. Así, el viernes 31 de agosto, después del pasacalles inaugural y el encendido del alumbrado, tendrá lugar un concierto homenaje a Carlos Cano, en el que intervendrán Juan Santamaría y la Banda Municipal de Música de Priego.
Entre las actuaciones previstas en la Caseta Municipal, Mantas hacía alusión a las que protagonizarán Antonio Mejías, David Barrul, Toni Miranda, Salvador García “Pitu”, Laura Larrea, así como el espectáculo musical-taurino “El toreo, arte y expresión”, las exhibiciones de las academias de baile de Sebastián Leal y Faralaes, varios grupos de versiones y orquestas de gran prestigio.
La feria de ganado, los concursos de sevillanas y trovos, que alcanza este año su cuadragésimo tercera edición, son otros de los atractivos de la programación. En relación a este último, la edil de Festejos indicaba que tras la experiencia del pasado año, en el que se adelantó a los días previos y se trasladó a la Fuente del Rey y luego al Teatro Victoria por las inclemencias meteorológicas, se ha decidido volver a su fecha tradicional, el día 5 de septiembre y a un enclave también tradicional, como es el lateral de la Pista Cubierta de la Ciudad Deportiva.
Igualmente, la edil de Festejos hacía referencia a la celebración el 4 de septiembre del Día del Niño, en el que las atracciones tendrán un precio máximo de 2 euros, desde las 12:00 horas hasta el cierre de las mismas, mientras que el 5 de septiembre será el Día del Mayor, con descuentos durante toda la jornada en la Caseta Municipal del 50% en las bebidas.
Por su parte, Toni Musachs ponía de relieve que un evento de la envergadura de una Feria Real, y que supone la participación de un importante número de áreas municipales, como festejos, urbanismo, seguridad, infraestructuras, “es un trabajo de equipo”, aprovechando la ocasión para agradecer el esfuerzo que particularmente han de realizar los operarios del Área de Infraestructuras para para el montaje de la feria.
Entre las novedades de esta edición, Musachs destacaba el cambio de ubicación del botellón, que se traslada de la explanada de la Ciudad Deportiva a los aparcamientos de la rotonda de Los Almendros. Ante las consecuentes molestias que se causaban a los vecinos de la zona, el edil de Seguridad apuntaba que desde las delegaciones de Juventud, Festejos y Seguridad, “hemos decidido probar este traslado los días de feria”. Cambio de ubicación que vendrá de la mano de la implementación de las medidas de seguridad con presencia de personal de seguridad en los accesos, la instalación de aseos públicos y la recogida de residuos, ya que como reconocía Musachs, “queremos hacer una zona lo más segura posible y los menos ruidosa y molesta a los vecinos de la zona”.
Con respecto a la seguridad durante la celebración de la Feria Real, el edil concluía que se aumentará la presencia de agentes de la Policía Local, continuando con la protección de los accesos con bolardos de cemento, completándose el dispositivo con la presencia de Protección Civil y Cruz Roja en el recinto.