El pasado fin de semana se celebraron en Priego de Córdoba dos eventos espeleológicos dignos de mención por su especial interés. 

Junto al “IX Torneo de Córdoba de Técnicas de Progresión Vertical”, valedero para la “Copa de Andalucía 2012 de  TPV”, y del que ya dimos cumplida cuenta en un artículo anterior, del 20 al 22 de abril tenía lugar el “III Reencuentro de Antiguos Miembros del GULMONT” con la asistencia de 12 personas, entre los que se encontraban los dominicos Santiago Pérez Gago y Jesús García Álvarez, que fueron fundador y relevo en la dirección del mismo. Este grupo que practicó tanto el montañismo como la espeleología fue creado hace más de 50 años en el seno de la Universidad Laboral Onésimo Redondo de Córdoba. Junto al GEC (Grupo Espeleológico Córdoba) y los distintos grupo locales de la OJE fueron pioneros de la espeleología Cordobesa. El G40 durante el desarrollo del proyecto “Tras las Huellas de la Espeleología Cordobesa” entabló contacto con varios “gulmoneros”, no dudando en ofrecer a Priego y la intendencia del grupo al empezarse a gestarse la idea del reencuentro. A lo largo del fin de semana se realizaron diversas actividades (en las que tuvieron también cabida varios miembros del G40) en el trascurso de las que se rememoraron los trabajos espeleológicos que el GULMONT realizó en Priego y su comarca. En especial los que formaron parte de dos campamentos que tuvieron como sede la pedanía prieguense de Fuente Alhama en 1966 y 1969, aunque las exploraciones de cuevas y simas se irradiaron a distintas localidades. Como muestra de su importancia decir que durante los mismos, en colaboración con el GEC, se batió el record de profundidad de aquellos años en Córdoba en la Sima de Fuente Alhama y se trabajó en la exploración y topografía de la cueva de mayor desarrollo como era y es la Cueva del Yeso de Baena. Entre las citadas actividades hubo una visita turística a Priego, una entrada a la Cueva de los Murciélagos de Zuheros, una ruta senderista por el cañón del Río Bailón de la misma localidad, una ruta automovilística por el paisaje subbético cordobés y una comida de convivencia.