En los tiempos que corren están más vigentes que nunca los valores que impulsaron la autonomía andaluza así como la capacidad de integración del pueblo andaluz, que sigue afanándose para construir una sociedad más inclusiva, mejor y más justa.
El 28F tiene en este momento plena actualidad, nos recuerda que ésta es la hora de la política, del protagonismo de la ciudadanía que reclama participar en el diseño del presente y el futuro, así como de opinar e intervenir en las decisiones que afectan a la colectividad.
En las últimas cuatro décadas Andalucía ha avanzado notablemente, tanto desde el punto de vista del desarrollo material como de la convivencia y la estabilidad social, al tiempo que se ha defendido la idiosincrasia de cada territorio frente al riesgo de uniformidad. En este tiempo ha sido decisivo el papel desempeñado por los municipios y sus ayuntamientos como mecanismos de cohesión territorial, social y como ejemplo de la identidad andaluza. Prueba de ello es nuestro pueblo, Priego de Córdoba, que con una estructura territorial compleja compuesta por multitud de aldeas y diseminados ha sido capaz de desarrollar infraestructuras, equipamientos y políticas que han conseguido mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos.
Por eso, desde una ciudad de la importancia de Priego de Córdoba, debemos insistir en la importancia de un proyecto común para Andalucía que garantice la igualdad y reconozca las particularidades de cada territorio, apostando por el diálogo y el entendimiento para no renunciar a lo que legítimamente nos corresponde ni pretender lo que corresponde a otros. Es obligación de la administración autonómica combinar la unidad y la diversidad en todos los ámbitos, preservando la igualdad y los derechos por los que tanto hemos luchado.
Reivindicamos por ello el seguir avanzando y mejorando nuestros servicios públicos esenciales, completando en materia sanitaria las infraestructuras comprometidas por el gobierno andaluz, así como la mejora de las prestaciones y servicios de atención primaria, y que afectan a toda la zona básica de nuestra comarca.
Reclamamos el refuerzo y el apoyo a nuestra educación pública.
Y sobre todo un impulso hacia un modelo de transporte público que mejore la intercomunicación entre las distintas aldeas de nuestro municipio con Priego y la capital cordobesa.
Por tanto se hace necesario abrir un nuevo proceso de transformación y cambio que haga posible que los municipios afiancen su compromiso con las señas de identidad de Andalucía, con el objetivo de afrontar con éxito los nuevos retos del siglo XXI, entre ellos el cambio climático o la despoblación de nuestras zonas rurales.
Para ello y desde la madurez democrática alcanzada por los ayuntamientos a lo largo de este tiempo reivindico una mayor capacidad de autogestión y al mismo tiempo una mejor capacidad de financiación.
Sigo manteniendo toda mi confianza en la fuerza y la inteligencia de ciudades como Priego, en la capacidad de esfuerzo y trabajo de mis paisanos para proponer respuestas eficaces para salir de la crisis, manteniendo el principio básico de la defensa de los menos favorecidos, quienes tienen que recibir una respuesta basada en la solidaridad y en la definición de nuevos modelos productivos que son los que tenemos que impulsar.