Zona noroeste del castillo, donde se centrará la actuación. (Foto: R. Cobo)

Rafael Carmona y Juan Ramón Valdivia, esta mañana durante su comparecencia ante los medios. (Foto: R. Cobo)

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Priego ha sido una de las tres localidades de la provincia de Córdoba, junto a Puente Genil y Palma del Río, cuyo proyecto está incluido en las resoluciones provisionales de la línea de ayudas del Ministerio de Industria y Turismo enmarcadas del Programa de Mejora de la Competitividad y de Dinamización del Patrimonio Histórico con uso turístico, financiado con fondos Netx Generation y destinado a la mejora del uso turístico en Bienes de Interés Cultural (BIC). 

Una convocatoria de una “enorme importancia económica”, como así la ha definido el alcalde prieguense, Juan Ramón Valdivia, en la rueda de prensa que ha ofrecido esta mañana en el patio de armas de la fortaleza medieval en compañía del arqueólogo municipal, Rafael Carmona.

Como señalaba el Alcalde, el proyecto, denominado “Por un Castillo más atractivo y accesible” y cuya cuantía se eleva de 1.499.768 euros, “fue presentado en mayo de 2023 recibiendo ahora la resolución provisional”, anunciando que, “pese a tener una elevada puntuación, 79,5 puntos sobre 100 posibles,  vamos a hacer una serie de alegaciones porque creemos que el proyecto tiene todavía unos puntos de mejora”.

Valdivia, que aprovechaba la ocasión para agradecer el trabajo realizado por técnicos y responsables políticos, reconocía que este tipo de convocatorias, “no te las regala nadie”, recordando las intervenciones que se han realizado en el castillo desde que en 1996 se donó a la ciudad. En este sentido, el alcalde añadía que desde 2010 a 2023, “se había invertido 2.813.000 euros”, incidiendo en el hecho de que con la ayuda ahora aprobada provisionalmente, “se va a invertir la mitad de lo que se ha invertido durante catorce años, de ahí la importancia que sentimos con esta concesión”.

En cuanto al proyecto, que Valdivia catalogaba como “muy completo”, destinará 1,37 millones de euros a las obras de conservación y restauración de la zona noreste de la fortaleza, siendo esta la intervención más destacada, a la que se une un panel retroiluminado en la segunda planta de la torre del homenaje, una mesa panorámica interpretativa del paisaje y una maqueta en bronce del castillo, que estará colocada en el exterior de la fortaleza, además de una audioguía, paneles informativos en braille, y un estudio estadístico de los visitantes que acceden al monumento. 

En definitiva, una actuación que hará que, como gráficamente expresaba Valdivia, “de una manera contundente el castillo de otro salto más de calidad, no solamente en la conservación, en los estudios arqueológicos e históricos que hacen falta para un bien de esta categoría, sino también para su aprovechamiento turístico”.

Por su parte, Rafael Carmona recordaba que desde su donación a la ciudad en 1996, “los primeros trabajos se llevaron a cabo en 1997”, haciendo alusión a las excavaciones de los años 1998, 2002 y 2003, “campañas fundamentales porque, de manera previa había que planificar con lógica y sentido común la actuación, aportando por tanto una información fundamental para llevar a buen término las intervenciones arquitectónicas que luego se han ido haciendo”.

Para Carmona, la actuación en el sector noroeste de la fortaleza, “es fundamental para la comprensión del castillo, ya que en esta zona se ubican las murallas de época omeya, fechadas en los siglos IX y X, las modificaciones bajo-medievales, y elemento singulares como la cañonera que se construyó con motivo de la Guerra de Granada”. 

Elementos que como incidía el arqueólogo, “no podían estar al descubierto por su excesiva fragilidad, por lo que, gracias a esta actuación, todo este sector se convertirá en una cripta arqueológica, con un acceso independiente y específico, donde los visitantes podrán contemplar ese registro arqueológico perfectamente musealizado, comprensible, conservado y protegido de las inclemencias meteorológicas, siendo por tanto un paso cualitativo importante”.  

Una vez que se complete esta nueva actuación, Carmona adelantaba que la última fase se centrará en terminar de excavar en extensión el patio de armas y conseguir un centro de interpretación específicamente de la fortificación, ya que como concluía, “Priego ya tenía un castillo que era referencia, pero ahora mismo es una referencia inexcusable para cualquiera que quiera hablar de las fortificaciones medievales en el ámbito de la península Ibérica”.