Raúl Pérez Cobo
Sábado 12 de febrero de 2011 - 11:23
generica

El sabroso hueso de la política hace que los distintos candidatos a la dirección del ayuntamiento ya estén meneando su colita y babeando promesas, a la par: “que de un saltito yo arreglo esto”, “que meneo la patita y de una patada le damos solución a los problemas”, “que con un ladrido acabamos con el paro”.

Hasta ahora el logro máximo de precampaña, según ellos mismos nos anuncian, es que visite Priego el responsable de su partido, el presidente, que vendrá con miles de soluciones a nuestros males –visita relámpago que nos servirá de gran ayuda y que hará que el jefazo del partido se acuerde de nosotros hasta que salga por las Angosturas o por otro lado. Pero, sintámonos homenajeados: nos ha hecho una visita-. Otra dieta más.
Hablemos del PRODI y el paro. Y hablemos de un caso real, y como éste imagino que habrá demasiados, en nuestro municipio.
El Programa Temporal de Protección por Desempleo e Inserción (PRODI) sustituye la actual ayuda de 426 euros a los parados sin ningún tipo de prestación por una subvención a aquellos que realicen cursos de formación que les facilite encontrar un puesto de trabajo. Hasta ahí la teoría. (Lo de cursos que hagas y al final te sirvan para encontrar un empleo deberíamos llamarlo de otra manera: entretenimiento, quizás).
El PRODI, poco pródigo, según lo que contaremos, como ha agotado la partida presupuestaria destinada a ayuda para desempleados, en lugar de ayudar a disminuir, verán la ironía, el paro, lo va a aumentar. En este caso, durante los seis meses que ha durado el programita y que trataría de colocar de nuevo a la persona de nuestro ejemplo, el programa ha tenido dos “orientadoras laborales” y las dos, a día de hoy, están despedidas, sin trabajo y en paro. ¿Para qué ha servido un programa que pretendía la búsqueda de trabajo? Para aumentar la lista del paro, precisamente, con las dos personas que trataban de ayudar a los desempleados en su búsqueda. Las que iban a dar trabajo o ayuda se han quedado sin trabajo y sin ayuda. Con lo que, hace seis meses, al inicio del programa PRODI, únicamente el desempleado era la persona que buscaba trabajo, ahora en marzo serán tres: las dos orientadoras y el parado que seguirá siendo parado.
Y ahora vienen estos políticos con sus campañas y sus elecciones. “Qué bien, si nos ha visitado el líder y a los otros, no, que los otros líderes ni siquieran bajan hasta Priego”. Qué gran adelanto: con ese magnífico logro tenemos para reírnos de problemas tan insustanciales como el del poco pródigo PRODI y su fin y su inútil inicio. Si esa es la solución…Quizás si bajaran sus excesivos sueldos y el resto lo echaran como ayuda a la ayuda presupuestada para programas como el PRODI, a lo mejor manteníamos a algunas familias más tiempo sin pasar calamidades.
“Cercanía, trabajo y proyectos de futuro”. Vamos a ver qué “plazos, qué proyectos y qué prioridades”. Según Arenas, esperemos que sus palabras no caigan en movedizas arenas, crecimiento de suelo industrial aparte que promete Ceballos, “para que deje de estar discriminado –se refiere a nuestro pueblo- y se resuelvan los agravios que está sufriendo en materia de carreteras o sanidad”. Otros que nos van a poner un hospital.
Recuerden el grito de la Junta de no hace mucho: “Andalucía imparable”, será para la clase política, que no necesita de PRODI, mientras que los desempleados siguen necesitando un prodigio, prodigio que no es la visita de cualquier líder regional.

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