La polifacética diseñadora madrileña impartió ayer una clase magistral en la quinta cátedra Elio Berhanyer
Redacción
Viernes 8 de abril de 2011 - 16:38

La constancia y la coherencia en su trabajo fueron dos de los aspectos que Ágatha Ruiz de la Prada destacó ayer en el transcurso de la sexta clase de la Cátedra Elio Berhanyer, iniciativa formativa impulsada por el Centro Tecnológico del Textil (Citta) con el patrocinio de la Fundación Cajasur, la Diputación de Córdoba y el Centro Tecnológico Andaluz del Diseño (Surgenia).

Tras la presentación que sobre la ponente realizó el propio titular de la Cátedra, la polifacética diseñadora y empresaria madrileña realizó un recorrido por lo que es su “frenética” actividad a lo largo de un año, centrándose en esta ocasión en todos los proyectos e iniciativas que llevó a cabo a lo largo del 2009, entre los que enumeró su participación en los desfiles de Milán, París, Nueva York, Kuala Lumpur, Florencia, Miami o Casablanca entre otros, analizando proyectos como los murales gigantes realizados en Buenos Aires, Santiago de Chile o Madrid, el diseño de los trajes de las azafatas y el maillot del premio de la montaña en el Tour de Francia, la salida al mercado de uno de sus perfumes, la creación de una colección de puertas blindadas, el vestuario para la muñeca Barbie, lo que a su vez le permitió participar en la Barbie Fashion Week, así como otras colecciones de objetos tan variopintos como cascos de moto, encendedores o pinzas de depilar, objetos y trabajos “agathizados” como reconoció la propia diseñadora.
Por otra parte y a preguntas de los alumnos relacionadas con las formas de sus creaciones en moda, Ágatha enfatizó en al importancia de la “sensación”, reconociendo en este sentido que su especialidad, “no son los trajes sexi”, indicando que sus colecciones de moda, “las entiende muy poca gente, de ahí que en  España mis desfiles sean más comerciales mientras que fuera son más espectaculares”, recordando la colección, de clara influencia surrealista, con la que participó en la Milán Fashion Week.
Igualmente y ante la frenética actividad que caracteriza su día a día, de la Prada destacó la importancia de contar con un buen equipo de profesionales, “para que todo marche bien”, animando a los alumnos de la Cátedra a ser constantes en su trabajo, ya que según Ágatha, “la constancia en estos 30 años que llevo trabajando, es una de las claves que explican hasta dónde he llegado”.
La programación de la quinta edición de la Cátedra Elio Berhanyer tendrá su continuación el próximo jueves, 14 de abril, con una nueva clase, en esta ocasión centrada en las técnicas de cooulhunting y métodos de trabajo, analizándose igualmente las tendencias que caracterizarán las temporadas de verano y la del próximo invierno.

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