Estimados compañeros:
Quienes me conocéis sabéis que no soy en absoluto polémico, que no soy persona de entrar en debates estériles, que soy profundamente respetuoso, a veces demasiado, con las posturas y opiniones de los demás… pero la carta abierta publicada a través de este medio por las inexactitudes vertidas y la confusión a que puede dar lugar, siendo como soy parte implicada, me veo en la obligación de aclarar y puntualizar algunos aspectos que han sido mal entendidos o directamente tergiversados.

Lo hago porque soy parte implicada en esta visita y creo que cuando menos es poco elegante que se proceda de esta manera, que aunque se diga que no se tiene intención, ciertamente se molestan los sentimientos religiosos…. Y sobre todo porque es esa carta hay mucho subjetivismo, mucha opinión personal y mucha media verdad, que como todos sabemos es la mayor de las mentiras.
Insisto, sin ánimo de polemizar, sino de clarificar conceptos y de mostrar mi desacuerdo con el fondo y con las formas de proceder, y pedir como miembro de este claustro, que el nombre de este INSTITUTO no se asocie ni se confunda con la opinión de algunos de sus componentes, pues esta no es la opinión del INSTITUTO Álvarez Cubero, sino de algunos miembros de su claustro.
Estaremos de acuerdo en que el lenguaje no es neutro, sino que las expresiones utilizadas en esta carta tienen su intención, por ello, con la intención de clarificar conceptos, he de manifestar que de ninguna manera “ se convierte el centro en púlpito”, hablar de “extender entre los alumnos  su propia ideología religiosa” es una manera muy peculiar y hasta aviesa de entender la fe y la religión.
Te aclaro que en el ordenamiento educativo actual está perfectamente recogido el curriculum de la asignatura de Religión, sus contenidos, temario… y en absoluto es “catequesis de una confesión en particular”. Entiendo que esa afirmación es totalmente injustificada y que no solo muestra desconocimiento, sino que tiene una clara intención de tergiversar la realidad para influir en la opinión de los lectores de la carta, y eso es MANIPULAR.
No quiero pasar por alto el manido y manipulado tema de la aconfesionalidad del Estado español, y su torcida interpretación para intentar justificar una postura personal, y te aclaro que la aconfesionalidad no significa relegar a la religión al estricto ámbito privado y expulsarla de lo público.  Te remito al artículo 27.3 de la Constitución Española, y hasta al artículo 18 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Te informo, ya que no has tenido la delicadeza de preguntarme, que la actividad está recogida en la Programación de la Asignatura de Religión, que se ha comunicado al Centro, se ha aprobado en Consejo Escolar… y se va a realizar en mi clase de religión y con los alumnos de religión, siguiendo escrupulosamente las directrices dadas por la Dirección del Centro, emanadas directamente de la Delegación.
No entro a valorar tu subjetiva opinión de la persona que viene a visitar nuestro centro, sólo decirte que al ser tan subjetiva pero tan radical, debía de ser más personal, quiero decir, menos pública, pues es tuya, y no creo que sea elegante ni justo proyectarla a los demás, mucho menos cuando al interesado no se le da opción a responder. Aparte de que dice muy poco del talante respetuoso, tolerante y dialogante del que haces gala.
En cuanto a las fuentes de información de las que te nutres, el Plural Digital, Público…se comentan por sí solos, afortunadamente el panorama periodístico español, es variado plural y público en la completa acepción del término, te invito a que amplies horizontes, y si quieres te puedo proporcionar documentación escrita ( Homilías, Cartas Pastorales…) que muestran y manifiestan claramente la manera de pensar  y proceder de esta persona a la que tan duramente juzgas, pues de todos es sabido que no es nada objetivo  tomar unas cuantas frases extractadas y sacadas de contexto, que no haces una foto del personaje sino una caricatura grotesca, pues sólo señalas los rasgos que quieres ridiculizar…. Y eso no es la realidad
Insisto en que no tengo intención de polemizar, por lo que no voy a utilizar más este medio, también por respeto a los compañeros. Quedo a tu disposición por si quieres que  comentemos cualquier aspecto, o quieres hacerme algún comentario.