OCIO/ESPECTÁCULOS | Música
Dos extraordinarios conciertos conmemoran la festividad de Santa Cecilia
Corrieron a cargo de la Banda Sinfónica de la Escuela Municipal de Música y la Banda Sinfónica Soledad Coronada
Lunes 26 de noviembre de 2012 - 12:56
La conmemoración de Santa Cecilia, patrona de la música, ha contado este año con dos eventos musicales de alto nivel, protagonizados por dos formaciones prieguenses, lo que vuelve a poner de manifiesto la afición musical que existe en nuestra localidad, como se refrendó en las magníficas entradas que registró el Teatro Victoria, escenario elegido para ambos conciertos.
Por orden cronológico, el sábado 24 de noviembre y con un lleno hasta la bandera, la Banda Sinfónica de la Escuela Municipal de Música de Priego, bajo la dirección de José Pablo Arjona Moral, ofrecía un original concierto, de manera especial en su primera parte, en la que dentro de la denominada modalidad de música programática o descriptiva, se interpretó la Pasión de Cristo, de Ferrer Ferrá; Don Quijote, de Robert W. Smith; y Las leyendas de Alí Babá, de Bert Appermont, en las que se contó con la colaboración como narrador de Rafael Pimentel Luque. La segunda parte del concierto se centró en otro de los estilos en los que la Banda de al Escuela Municipal de Música más ha destacado en los últimos años, como son las bandas sonoras originales, en esta ocasión con algunas de las piezas más laureadas en las últimas décadas, como La lista de Shindler, de John Williams, en la que Mirian Castro Luque actuó como violinista solista; a la que siguió La vida es bella, de Nicola Piovani, John Williams in concert, del autor homónimo, y Piratas del Caribe. En el fin del mundo, de Hans Zimmer, piezas musicales que estuvieron acompañadas por la proyección de imágenes de sus respectivas películas gracias al montaje realizado por Luis Ortiz García.
El segundo de los conciertos programados para el fin de semana, en el que también se registró una gran afluencia de público, tenía como protagonista a la Banda Sinfónica Soledad Coronada, que dirigida por Juan Luis Expósito, presentó un programa no muy habitual en una formación centrada en la música cofrade. Como se puso ayer de manifiesto en el Teatro Victoria, esta joven formación puede afrontar cualquier repertorio, más si cabe después de hacer vibrar el público con todo un lujo de bis, el Danzón nº 2 del compositor mexicano Arturo Márquez. Previamente y durante casi noventa minutos, los integrantes de la Banda Sinfónica Soledad Coronada, fueron desgranando un programa compuesto por Soleá de Triana, de David Hurtado, Malagueña, de Ernesto Secuona; Capricho andaluz, de Cipriano Martínez Rücker; Cádiz, Granada y Sevilla de Isaac Albéniz; La Torre del Oro, de Jerónimo Giménez y Palindromía Flamenca, de A. Ruda Peco, en la que destacó la intervención como solista del saxo soprano Antonio Cobo Peregrina.
Reseñar finalmente que en varias de las piezas que conformaban el concierto actuaron la cantaora Paz de Manuel, el guitarrista Javier López y la bailaora Carmela López Barrientos.