Carrillo y Casanueva durante su visita a la zona. (Foto: Cedida) (Foto: Cedida)

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha llevado a cabo la limpieza del cauce del río Zagrilla, a su paso por el paraje Llano de las Monjas y aguas arriba de Zagrilla Baja, una de las zonas más inundables del término municipal de Priego.

Según la nota remitida por el Consistorio prieguense, estos trabajos de emergencia han sido posibles gracias a las gestiones realizadas por la Delegación de Medio Ambiente del Ayuntamiento de nuestra localidad, “y la buena disposición de la Confederación”, como así apunta en la citada nota la concejal delegada de Medio Ambiente, Cristina Casanueva, que en compañía del edil de Aldeas, Luis Miguel Carrillo, ha visitado la zona para conocer el estado de los citados trabajos.
Como recoge el comunicado, la actuación principal se ha llevado a cabo a lo largo de unos 100 metros lineales, en los que se ha limpiado el entorno del puente que da acceso a las urbanizaciones cercanas al otro lado del margen, tanto aguas arriba como aguas abajo, han informado desde Confederación, entidad que ha sufragado los gastos con una inversión de 18.000 euros.
Más concretamente, los trabajos han consistido en la retirada de sedimentos que mermaban la capacidad hidráulica del río, y de vegetación seca y árboles muertos, en un tramo que presenta en varios puntos graves problemas de colmatación en el cauce del río y el puente por los diferentes episodios de avenidas acaecidos en los últimos años.
En los próximos días, esta intervención se completará con una serie de actuaciones aguas arriba que consistirán en la retirada de una isleta de sedimentos que desvía el cauce y la protección de la margen derecha frente a la erosión.
Por su parte, el concejal de Aldeas ha recordado que esta zona recoge las aguas procedentes de las zonas de altas montañas que lo rodean, lo que provoca que cuando se producen precipitaciones importante, tenga una cuenca muy grande por la unión de varios cauces hídricos, lo que provoca que se produzcan remolinos y se inunden parcelas y negocios hasta tres y cuatro veces al año.