antonio Manuel Rodríguez durante su intervención ayer en el Teatro Victoria. (Foto: R. Cobo) (Foto: Cedida)

“No podemos tolerar que nos gobiernen los peores, las sombras en lugar de las luces, ya que el 25 de marzo está en juego Andalucía”.

Así finalizaba ayer el cabeza de lista por Córdoba del Partido Andalucista, Antonio Manuel Rodríguez, su intervención en el acto celebrado por su partido en el Teatro Victoria y en el compartió atril con Sebastián de la Obra y los prieguenses Ana Rosa Rogel y Juan Carlos Pérez Cabello, número 6 y 5 respectivamente de la candidatura andalucista por nuestra provincia.
Un acto cargado de contenido y mensajes dirigidos al PP, “porque prometer es muy fácil y desdecirse después también”, como indicó en su intervención Pérez Cabello, que insistió en que, “no debemos dejarnos engañar con promesas que no se pueden cumplir”, poniendo como ejemplo al PP de Priego, “que hizo muchas promesas que ahora no están cumpliendo”. En este sentido, Pérez Cabello enumeró algunos de los “recortes” que los populares están aplicando a la sanidad, los servicios sociales o la educación, añadiendo que para el PA, “el paro es la prioridad número uno de un programa electoral, hecho desde, por y para Andalucía”.
En un tono mucho más metafórico se dirigió a los presentes Sebastián de la Obra, que con la facilidad dialéctica que lo caracteriza, analizó el engaño que esconde toda apariencia, apuntando en este sentido que el pueblo andaluz, “vive en una permanente apariencia y es incapaz de tomar la iniciativa”. Ante esta situación, de la Obra abogó por una apuesta por un “vigía”, una persona que vea más allá, presentando al candidato del PA, Antonio Manuel Rodríguez, como uno de los vigías que necesita nuestra región.
En su tercera intervención en Priego en el último mes, lo que pone de relieve el peso de nuestra localidad en el PA cordobés, Rodríguez comparó Andalucía con una casa, en el sentido de quién la habita, no de la construcción en sí, apuntando que percibía que esa casa llamada Andalucía, “no está alegre, ya que tiene el ánimo amputado porque nos hemos olvidado que somos una casa abierta”. Recordando la voluntad que hace 30 años dio como resultado que los andaluces consiguieran su estatuto de autonomía, el candidato del PA se lamentó porque hoy, “este pueblo parece que está de rodillas, delegando su autonomía a otros de fuera”, pese a lo cual, Rodríguez confesó que presentía que estamos, “ante un nuevo amanecer”, un momento por clave para el futuro de nuestra comunidad, “por lo que no podemos tolerar que nos gobiernen los peores, las sombras en lugar de las luces, ya que el 25 de marzo está en juego Andalucía”, sentenció.