HERMANDADES | La Soledad
María Stma. de la Soledad Coronada contará desde mañana con una calle que llevará su nombre
El tramo de la actual calle Tercia entre Cava y la plaza de San Pedro, pasará a denominarse Virgen de la Soledad
Jueves 17 de mayo de 2012 - 16:18
Tras muchos años de gestiones la Real Hermandad y Cofradía del Santo Entierro de Cristo y María Stma. de la Soledad Coronada verá mañana cumplido uno de sus anhelos con la inauguración de una calle en la que figurará el nombre de su titular mariana.
Un proyecto gestado en el seno de la congregación de la noche del Viernes Santo prieguense en anteriores Juntas de Gobierno y que, como apuntaba el actual hermano mayor, Juan Manuel de los Ríos Fernández, se retomó el pasado año, contándose con la adhesión de numerosas entidades, entre ellas todas las cofradías y hermandades prieguenses, establecimientos y vecinos de la calle, así como la Asociación de Comercio y Hostelería de Priego.
En este sentido, el hermano mayor de la Soledad apuntaba que también se contó con el apoyo unánime de todas las fuerzas políticas con representación en la Corporación municipal prieguense, que aprobaron en el Pleno del 30 de septiembre de 2010 el cambio de denominación de la actual calle Tercia, en el tramo que discurre entre la calle Cava y la plaza de San Pedro, por el de Virgen de la Soledad, que será la nueva denominación de la misma, a todos los efectos, a partir de mañana viernes.
Un cambio de denominación que según puntualizaba Juan Manuel de los Ríos, se ha ido dilatando en el tiempo a consecuencia de la celebración en los dos últimos años de distintos procesos electorales municipales, generales y autonómicos, aprovechándose ahora para proceder al cambio de denominación.
En cuanto al acto en sí, que se celebrará mañana viernes al término del primer día del triduo final, el hermano mayor de la Soledad adelantaba que consistirá en el descubrimiento de las placas colocadas en ambos extremos del nuevo vial, así como la bendición de un azulejo cerámico conmemorativo, emplazado en el lateral de la capilla de la Soledad, donde antaño la propia cofradía había colocado un pequeño altar con una cruz de hierro.