Leyendo el artículo de Miguel Forcada, titulado “Me gusta tanto la espeleología”, tengo que aclararle que yo no he solicitado ninguna explicación sobre la concesión o no de ninguna medalla, solo he pedido un motivo serio sobre la denegación de un expediente que bien parece haber guardado alguien en un cajón, como comprobará más adelante.
En cuanto a la distinción que usted solicitó en el año 2006, de la cual yo fui partícipe, es mentira lo que dice en su artículo, ya que lo que usted nos propuso fue conceder una medalla de plata a la espeleología prieguense que recibiría el GES-Priego, pero que recogería Antonio Alcalá, presidente del G40 y antiguo socio del GES-Priego.En la Asamblea General posterior a esta propuesta –y así consta por escrito en su acta- decidimos que si el GES-Priego recibía alguna distinción, la recogería –lógicamente- su presidente; y así se le comunicó a usted, que procedió a retirar su propia propuesta.
Por otro lado, usted verá lo que firma; yo como le dije, tacho su firma cuando desee, aunque no me lo imagino a usted ir firmando cosas a lo loco por muy tempranito que sea.
Es muy de agradecer que usted no haya participado directamente en tan irregular proceso, pero es su discurso el que el pueblo de Priego representado por su Ayuntamiento, ha votado y no una relación de méritos presentada en el registro en tiempo y forma.
Habla usted de mala relación entre el GES-Priego y el G40, y fíjese que tropelía y desconocimiento de la espeleología que tanto le gusta, que es muy bien sabido que entre ambas asociaciones no hay enfrentamiento alguno; sí es cierto que hay posturas enfrentadas entre el que suscribe y, al menos, cuatro personas que pertenecen al G40; y como usted bien sabe el motivo principal de ese enfrentamiento son las colecciones arqueológicas ilegales privadas; colecciones fruto de años de expolio en cuevas y yacimientos de Priego, que como usted comprenderá pertenecen al pueblo de Priego, y a pesar de los años continúan en manos de quien pretende llamarse espeleólogo. Por otro lado nunca, a pesar de que ha escrito un libro sobre la materia, le he visto reprobar o desautorizar este tipo de conductas ilegales. La espeleología que tanto le gusta a usted es otra cosa, se lo digo yo, que llevo 30 años practicándola.
Mire el lector, hasta qué punto se intenta mediatizar una mera propuesta de distinción, que la Sra. Alcaldesa me propuso verbalmente el discurso de Miguel Forcada, consistente en la concesión de una medalla de plata al GES-Priego y otra al G40, a lo cual yo respondí que si éste Ayuntamiento impone una distinción al GES-Priego, por supuesto la vamos a aceptar, pero hay una serie de méritos únicos –entregados en el registro- que todo el mundo desconoce y yo quiero que al menos se lean y se valoren. Ésa es mi queja.
Fíjese también que en Priego hay tres asociaciones que practican la espeleología a saber: GES-Priego, G40 y Club de Montaña Horconera; Que en el GES-Priego estaríamos muy contentos de que se distinguiera al G40 y al CM Horconera por su práctica espeleológica; Que a nadie se le niega su pertenencia al GES-Priego, como puede comprobarse en el libro de Miguel Forcada en su libro, que publicó mayormente con las memorias que yo le facilité; pero fíjese también que en el GES-Priego confluyen méritos únicos que no se contemplan en las restantes, como por ejemplo haber sido el germen del actual Museo de Historia Local, colaborador en la actualidad -sin recibir un euro a cambio- con hasta 5 Áreas de este Ayuntamiento, relevo generacional continuo desde el año 1957 (57 años de actividad ininterrumpida), fallecimiento de uno de sus miembros en el año 1981 en accidente en la sima de Fuente Alhama y hasta 6 reconocimientos de entidades (5 entidades prieguenses y una jiennense).
En el acta de la Junta de Portavoces de este Ayuntamiento de 28 de octubre de 2013, dice literalmente: “Se abre debate respecto a la solicitud de medalla de plata para GESP, presentada por ellos mismos, ya que entendemos que no solo se debería conceder a un grupo solamente, sino a los senderistas de Priego en general”. ¡Qué barbaridad y qué desconocimiento del tema! ¿En qué cajón quedó escondida nuestra solicitud? Creo que es motivo suficiente para quejarse, ¡digo yo!
Para terminar, también le voy a regalar una cita -en este caso de un escritor francés- Jean François Revel, quien escribe en su libro El conocimiento inútil, “La primera de todas las fuerzas que dirigen el mundo es la mentira”.