La comparativa de lo que ocurre a nivel nacional en la política con lo sucedido en el último pleno de presupuestos, es un acto simplista de quien quiere despistar y eludir su responsabilidad.

Obviamente, la convulsión política a nivel nacional refleja la incertidumbre y poca seriedad con la que nos tomamos los temas de bien común, anteponiendo el beneficio personal y de partido. De esta forma, es difícil llegar a acuerdos si no salimos del egocentrismo e individualismo en el que vivimos. No obstante, si en nuestro municipio la oposición hubiera seguido los pasos de la política a nivel nacional, así como en muchas otras localidades de nuestra comunidad autónoma, el equipo de gobierno no sería el actual, que parece que este punto a algunos se les olvida en cuanto a lo que se viene haciendo de comparar.
Pero la cuestión en concreto que viene al caso no es ésta, sino la pataleta del equipo de gobierno ante el NO unánime de la oposición en el pleno de presupuestos. Comprendemos su malestar pero todo tiene un límite. Por ello nos vemos en la necesidad de aclarar algunas cuestiones.
¿Qué ocurre cuando no se aprueban los presupuestos de un ejercicio? Se prorrogan los del año anterior, en este caso, los de 2015. Se mantienen los importes de las partidas de gasto corriente del ejercicio precedente y las previsiones de ingresos del mismo. No significa que el equipo de gobierno se quede sin dinero. Habrá recursos para contratos sociales, plan de aldeas, inversiones, etc. La diferencia radica en que el equipo de gobierno no podrá decidir, por sí sólo, nuevas inversiones no barajadas en el año anterior, necesitando en estos casos de una modificación presupuestaria y su aprobación en pleno. Procedimiento que, por cierto, no es nada nuevo, pues se usa con normalidad aún con presupuestos aprobados.
Por tanto la única diferencia será que el equipo de gobierno no tendrá vía libre para decidir donde se inyecta dinero y donde se aplica la tijera, sino que será necesario diálogo y acuerdo con todos los grupos que forman la Corporación, ¿Tan alarmante es esto?
Pues parece que a ojos del equipo de gobierno del Partido Popular, SÍ. Es mucho mejor lamentarse y gimotear que afrontar el NO de forma responsable. Responsabilidad, algo tan solicitado por la Sra. Alcaldesa a los grupos de la oposición. Pues bien, en su momento explicamos y argumentamos los motivos de nuestro NO, pero lo que parece pasar por alto son las horas de dedicación, trabajo, esfuerzo personal que hay detrás de ese NO. Es fácil vender a los ciudadanos la falta de responsabilidad de la oposición, lo malos que somos por obstaculizar sus planes de gobierno, etc. Por otro lado, lo difícil es parar y reflexionar sobre qué se ha hecho mal para recibir un no por respuesta, pero claro, esto no vende...En cambio, lo qué si es una buena campaña política (eso sí debemos reconocer que el equipo de gobierno lo hace muy bien) es vender lo buenos que son, qué bien lo hacen todo, ¿Cómo se nos ocurre no aprobarles los presupuestos?... ¡Qué malos son la oposición que quieren miseria y ruina para nuestra localidad! Son expertos en gritar a bombo y platillo sus bondades y virtudes. Y esto, lo hemos podido ver, no sólo en los últimos días, sino en los últimos años, en redes sociales, ruedas de prensa, artículos, etc. Cuidado, "la alabanza propia envilece".
Y nosotros nos preguntamos ¿Cómo la Sra. Alcaldesa con tantos años en política se aventura a llevar un presupuesto en el mes de abril sin tener medianamente trabajado el posicionamiento de los diferentes grupos de la oposición, o por lo menos la garantía de la abstención de alguno? A lo mejor, sencillamente, porque no le interesaba su aprobación, está mucho más cómoda instalada en el victimismo y culpando a los técnicos de cerrar los ejercicios de marzo a marzo y a los grupos de la oposición de llevar las propuestas tarde y difíciles de encajar en su presupuesto. Los acuerdos hay que trabajarlos, cada uno debe de ceder un tramo, pero aquí la cesión del equipo del gobierno a nuestro favor para que le apoyáramos su presupuesto consiste, en darnos unos 50.000 euros de un total de 18.030.000 euros. A la solicitud de creación de naves en la ampliación del Polígono de la Vega, nos daba usted 10.000 euros (de risa). A la terminación del nuevo modulo de vestuarios del Polideportivo Municipal (propuesta nuestra al presupuesto de 2015), que sería para el 2.017…
La misma noche del debate del presupuesto las redes sociales se incendiaron con comentarios y fotografías por parte de su grupo, demostrando el más absoluto desprecio hacia los grupos de la oposición y sobre todo a la Institución. Ya que para ustedes parece que fue una victoria el que se rechazaran los presupuestos y así poder seguir instalados en el victimismo.
Alarmantes son los problemas que tiene este Ayuntamiento en algunos temas como son: empresa de aguas, piscina, Geiss, personal, policía, etc. Temas en los que no vemos por su parte, una intención firme de ponerles solución.
Y qué decir del remanente de tesorería que ahora es positivo, ese que dice que no ha salido a publicitar, pues le recordamos, que ha sido obtenido por medio de revisiones y actualizaciones catastrales que nuestros vecinos han visto reflejados en sus recibos del Impuesto sobre Bienes Inmuebles.
Ante la constante queja y el llamamiento por parte de la Sra. Alcaldesa a la responsabilidad política de los que ejercemos la oposición en nuestro municipio, manifestamos nuestro enorme malestar por menospreciar nuestro esfuerzo personal, las horas de trabajo que sacamos de nuestro tiempo libre y de nuestras familias, ya que no estamos liberados y ejercemos nuestras profesiones, algo que hacemos con honor por nuestro pueblo y no usándolo como lamento. Sra. Alcaldesa, estamos orgullos de ser oposición y ejercer esta difícil labor sin el afán de sillones, ni de poder, ni dinero, puesto que ninguno de nosotros vive de la política, sino desde el interés de aportar nuestro esfuerzo y dedicación a la mejora de la sociedad en la que vivimos, y en nuestro caso, para lo que consideramos que es mejor y más justo para nuestro pueblo y aldeas.
Por todo esto y desde el ejercicio de la responsabilidad, lo más difícil es decir NO. Ser responsable es saber decir NO en muchas ocasiones. Lo fácil pero costoso a largo plazo es ser conformista y mostrar una actitud pasiva que permita al otro el abuso y la manipulación. Ser responsable es saber decir NO con argumentos, algo que hemos ido trabajando semana a semana, tardes de domingo, horas y horas de reuniones, de revisiones y análisis de documentos, no solo entre nuestro grupo sino también con usted y su Concejal de Hacienda. Pero esto no se cuenta, esto no se dice, es más fácil hacer ver al ciudadano lo irresponsables que somos. Y luego, ¿se sorprende de un NO unánime?