Ya lo dijeron los cronistas locales hace siglos, que las aldeas eran calles separadas de Priego. Y no hubo mejor definición, porque en esencia eso es lo que son nuestras aldeas, una parte más de nuestro pueblo aunque al equipo de gobierno de María Luisa Ceballos y al Partido Popular se les haya olvidado.
No es que sea nueva la dejadez en todo aquello relacionado con las aldeas, pero sí resulta indignante como el actual equipo de gobierno ha marginado a las aldeas en el proyecto de fondos europeos que nuestro Ayuntamiento ha solicitado en el marco de las Estrategias Integradas de Desarrollo Urbano Sostenible (DUSI), unos fondos europeos disponibles para ciudades de más de 20.000 habitantes y que Priego, con 19.222 habitantes, solo puede solicitar sumando a la población de las aldeas. La estrategia presentada por el Ayuntamiento de Priego viene a satisfacer problemas puntuales y no una transformación de futuro para nuestro pueblo, y no contempla proyectos en nuestras aldeas salvo unas ridículas actuaciones musicales que nada tienen que ver con el principal problema social y territorial que presentan: la despoblación, con unas consecuencias negativas para las cerca de cuatro mil personas que son Priego, pero que cada vez tienen menos servicios y se sienten más aislados por su pueblo y de su pueblo.
Más de seis millones de euros de inversiones previstas casi en su totalidad en el núcleo urbano de Priego, con 19.222 habitantes. Estos fondos europeos solo están disponibles para ciudades de más de 20.000 habitantes. Si no fuese por los habitantes de nuestras aldeas Priego no podría pedir esta ayuda, un proyecto que vuelve a demostrar la incapacidad de gestión del equipo de María Luisa Ceballos: se hace a la carrera, con una empresa externa y se pasa a la oposición para su estudio con un día de antelación al pleno, en una especie de ultimátum mediático, en el que la alcaldesa y el concejal delegado se vanaglorian de presentar esta solicitud de fondos. Cuando todos los pueblos están pidiéndolos, que Priego no los solicitase hubiese supuesto una moción de censura por incompetentes. Por ello, a pesar de no estar de acuerdo ni en el contenido ni en las formas, el Partido Socialista apoya este proyecto porque cualquier inversión que pueda venir a Priego es importante para el desarrollo de un pueblo que lleva una década sin saber qué quiere ser.