“Un sueño gigante hecho realidad”. Así se mostraba el prieguense Chema Jiménez del Caño en redes sociales nada más terminar su participación en el Campeonato del Mundo Ironman en Kona (Hawai).
Muchos meses de preparación, de esfuerzo y sacrificio para estar a la altura de una de las pruebas más exigentes y duras del panorama deportivo. Nadar 4 kilómetros en aguas abiertas del Pacífico, rodar 180 kilómetros de bicicleta y rematar la faena con una maratón, 42 kilómetros de carrera a pie, y todo ello en menos de nueve horas y media. A ello hay que sumar el elevado coste económico que supone participar en este tipo de eventos, contando con el apoyo de varias empresas locales, instituciones, y por supuesto de su familia.
“He hecho la carrera de mi vida”, indicaba Jiménez, que marcó un crono final de 9:28:44, siendo vigésimo noveno en la categoría M25-29 y primer español clasificado, y trigésimo primero en la General Masculina, codeándose con la élite mundial del Ironman.
La prueba se iniciaba con el segmento de natación, donde el prieguense empleó un tiempo de 1:02:55 en completar los 4 kilómetros a nado. Tras una transición de 3:21 para coger la bicicleta, inició el siguiente segmento, recorriendo los siguientes 180 kilómetros pedaleando en 5:13:37, a una media de 34,6 kilómetros por hora; y completó la maratón a pie en 3:03:40, a un promedio de 4:17 por kilómetro. Unos parciales con mucho mérito, y más si cabe cuando al lado tienes a los mejores y las mejores especialistas del mundo.