El cierre continuado desde el pasado mes de julio de la quinta planta de traumatología del hospital comarcal Infanta Margarita de Cabra, que al igual que en años anteriores tendría ya que haberse reabierto al concluir el verano, es señal de la existencia de recortes sanitarios en el mencionado centro, según ha hecho constar a este medio el sindicato de enfermería Satse.
Rafael Osuna, representante de dicha organización señalaba a Priego Digital, que la no disposición de sus 16 habitaciones y 32 plazas de hospitalización, que oferta más de 900 estancias hospitalarias mensuales y 250 pacientes hospitalizados al mes, con una estancia media que ronda los 4 días, ha supuesto un recorte objetivo de 31 trabajadores, de los que 15 son enfermeras, 13 auxiliares de Enfermería, 1 administrativo, 1 celador y 1 limpiadora, "lo que supone en torno a un 3% de la plantilla del hospital -unos 1.000 trabajadores-, generando un recorte en el gasto hospitalario de unos 100.000 euros mensuales entre gastos directos e indirectos".
Además desde el Satse mostraban preocupación por los rumores existentes en el centro de alargar el cierre hasta finales de año, anunciado que de confirmarse, se daría "una respuesta agresiva de la acción sindical inmediata, si la planta no se abre urgentemente".
Osuna daba a conocer que en estos últimos días "hemos podido comprobar como pacientes octogenarios acudían a urgencias un día por la tarde, y eran ingresados en espera de cama disponible, permaneciendo durante toda la noche y buena parte de la mañana siguiente en una camilla en urgencias, hasta lograr una cama disponible, no siendo honesto, no dar toda la información a pacientes y familiares, ya que se les oculta que están ingresados en condiciones precarias mientras se mantiene cerrada una planta entera de hospitalización".
El otro efecto negativo añadía "es el derrumbamiento en las contrataciones sufrido en octubre, prácticamente anuladas, ya que la dirección utiliza a los 30 profesionales de la planta cerrada como bolsa de reserva para cubrir licencias, permisos y bajas, entre otros, observándose por primera vez como no se sustituyen permisos relacionados con el embarazo y el parto, algo hasta ahora blindado de los famosos recortes".
Por último el sindicato de enfermería Satse denunciaba que existen 18 interinidades sin adjudicar y 15 puestos de trabajo de enfermería eventual, procedente de la apertura de Salud Mental, que se tienen que convertir en vacantes al tratarse de puestos estructurales por ampliación de cartera de servicios.
LA DIRECCION NIEGA LOS RECORTES
Francisco Martí, director gerente del centro hospitalario señalaba a Priego Digital que si bien es cierto, que hasta el pasado año la planta cerrada durante los meses de verano se reabría en el mes de septiembre, usando para ello sólo las camas previsibles por el descenso de ingresos, las excepcionales condiciones climáticas están haciendo que a estas alturas del mes de octubre, no se hayan incrementado al no haber aparecido aún los brotes gripales.
Por ello no se ha reabierto la quinta planta, la de traumatología, no existiendo ninguna fecha predeterminada para ello aunque, "en cualquier momento que haga falta, existe personal para ponerla en marcha a la hora que sea, siendo ese el compromiso que tenemos con el personal, el reabrirla sin ningún problema".
Martí recordaba que "en las nuevas Urgencias se han incrementado las camas, pasando de 5 a 12 y disponemos de una sala con 8 sillones, que el pasado año no se tenía".
De todas formas no contemplan tenerla cerrada hasta fin de año, pues lo lógico es que aparezcan los brotes gripales, que provocan el incrementos de ingresos y de presión asistencial.
Por otro lado el director gerente desmentía que el cierre estuviese relacionado en modo alguno con algún tipo de recorte sanitario, "ya que a día de hoy, el presupuesto que se hace a principios de año, es el que tenemos", añadiendo que "lo lógico es hacer un uso lo más eficiente posible".