Desde hoy, el primer presidente de la Segunda República, Niceto Alcalá-Zamora y Torres, natural de Priego de Córdoba (1.877), ocupa su lugar de honor en el Congreso de los Diputados en Madrid, concretamente, en la galería de parlamentarios ilustres en el vestíbulo del edificio de ampliación III, junto a Clara Campoamor y Manuel Azaña.
Con este reconocimiento oficial, el Ayuntamiento de su ciudad natal ve cumplida una reivindicación histórica que se ha materializada con la donación a las Cortes de un busto de bronce del mandatario republicano, reproducción de una imagen que luce en su finca La Ginesa, en la aldea prieguense de El Cañuelo, obra del escultor Jacinto Higueras en el año 1.917, por encargo del Consistorio de La Carolina (Jaén), circunscripción por la que Alcalá-Zamora fue diputado en Las Cortes.
“Hoy es un día emotivo porque Niceto Alcalá-Zamora es uno de nuestros grandes personajes históricos, de una inteligencia excepcional, ha regresado hoy al lugar que le corresponde, al Congreso de los Diputados, donde fue uno de sus principales parlamentarios”, así lo ha expresado la alcaldesa de Priego de Córdoba, María Luisa Ceballos, tras la firma del acta de donación de la escultura, con el presidente de la Cámara, Jesús Posada. Con este acto simbólico se culmina un proceso que se inició en el año 1.999 con la conmemoración del 50 aniversario de su muerte, donde el Consejo de Ministros en Madrid le restituyó “su honorabilidad que le había arrebatado hasta ahora la historia”.
Durante su alocución ha hecho un breve recorrido por su carrera como notable jurista y su larga e intensa trayectoria política que desarrolló desde muy joven, cuando sólo contaba con 28 años, y que le llevó a la jefatura del Estado. Ceballos ha subrayado características del personaje como “hombre honrado, gran jurista, con un gran sentido de Estado y un legislador ejemplar”.
Sobre las magistrales intervenciones del estadista prieguense en las Cortes de la Restauración, la primera edil prieguense y también presidenta de la Diputación de Córdoba, ha destacado que fue “uno de sus diputados más destacados en aquel tiempo por su personal estilo, influyente orador que pronunciaba sus discursos con acento cordobés”. Fue un cordobés ejemplar que, en momentos difíciles en España, destacó por “su espíritu de concordia y equilibrio” y que murió en el exilio con “un puñado de tierra de su pueblo natal” por lo que hoy, es una fecha para recordar, tanto para España como Priego.
Por su parte, las primeras palabras del presidente de la Cámara han sido una reflexión hacia la persona del político Niceto Alcalá-Zamora y Torres. “Pienso que es propio de un gran país recordar con gratitud a cuantos han contribuido a forjar su historia y han tenido la noble ambición de servir a su Patria dedicando su vida a este propósito, como es el caso, de Alcalá-Zamora”. En este sentido, ha dicho que “a partir de hoy, esta escultura permitirá que el Congreso de los Diputados conserve el recuerdo perenne de uno de sus diputados más insignes”.
Posada ha agradecido la iniciativa del Ayuntamiento de Priego, y a su alcaldesa, que hayan reivindicado que “su efigie estuviera presente en el Congreso”, como así se aprobó, por unanimidad en un Pleno celebrado, “justamente hace un año”, el 29 de febrero de 2012”.
El acto institucional de descubrimiento de la imagen del estadista que se exhibirá, a partir de este día, en los pasillos del hemiciclo madrileño, ha comenzado con el saluda del Presidente y la presentación de la mesa de la Cámara. Al mismo tiempo, han estado presentes en dicho acto conmemorativo, cuatro de los cinco alcaldes democráticos que han pasado por el sillón consistorial prieguense, entre ellos, Pedro Sobrados, Tomás Delgado, Juan Carlos Pérez y la actual regidora, María Luisa Ceballos. También han asistido el Subdelegado del Gobierno por Córdoba, Juan José Primo, concejales de la Corporación municipal, diputados, numerosas autoridades, académicos, personalidades públicas, miembros del patronato Niceto Alcalá-Zamora y Torres, que alberga su casa-museo de la calle Río, y familiares, entre otros.
A continuación, en el mismo vestíbulo de la ampliación III del Congreso de los Diputados, los asistentes han recorrido la exposición fotográfica sobre Los viajes del presidente de la República Don Niceto Alcalá-Zamora, compuesta por 80 fotografías, muestra que ha sido posible gracias a la colaboración de la Fundación Rafael Botí.
El espectador podrá pasear por la España de aquellos años, a través de las visitas o giras presidenciales, ya que Alcalá-Zamora, en el instante de ser investido por Las Cortes, el 14 de abril de 1.931 para desempeñar su alta magistratura, se impuso como una de sus primeras obligaciones conocer y visitar los distintos territorios del Estado. Los desplazamientos del Presidente fueron recogidos puntualmente, a través de extensos reportajes, en las páginas de los principales diarios nacionales y provinciales, que han sido las fuentes para la recuperación de estas fotografías y de los textos.
El proceso artístico que se siguió para la obtención del nuevo busto (de 54 centímetros de altura), fue la creación de un molde de la imagen original, obra del profesor de vaciado de la Escuela de Artes Dionisio Ortiz de Córdoba, Luis García, que -seguidamente-, se trasladó a la Fundación Marcelo de Sevilla donde se fundió la pieza con la técnica de la cera perdida y se le dio una pátina de bronce antiguo con tonos verdosos.
Al mismo tiempo, se le encargó a Mármoles Santo Domingo de Priego un pedestal en piedra de Sierra Elvira (Granada) y una peana, en la que se grabó en relieve una inscripción que dice: “Don Niceto Alcalá-Zamora y Torres, presidente de la II República”. En total, el conjunto escultórico mide 169 centímetros de altura y le ha costado a las arcas municipales unos 2.000 euros.