La inaccesibilidad a la extinta colonia de murciélago refuerza la hipótesis del envenenamiento, según el GES-Priego
Redacción
Martes 22 de octubre de 2013 - 18:04

Espeleólogos del Grupo de Exploraciones Subterráneas de Priego (GES-Priego) han descubierto una mortandad masiva de murciélago en una cavidad de la sierra de Jaula, en pleno Parque Natural de las Sierras Subbéticas Cordobesas.

Según un comunicado de prensa, los espeleólogos han podido contabilizar más de cien cadáveres de este mamífero en una sala de la cueva, donde están realizando trabajos de exploración, desobstrucción de galerías y topografía. Además han podido comprobar que la colonia, que un día ocupó sus techos, se halla prácticamente exterminada.
El GES-Priego quiere denunciar el exterminio de esta colonia sin revelar más datos acerca de su ubicación, ya que la política actual de medio ambiente en las sierras subbéticas en concreto, y de la administración pública en general, “es claramente perjudicial para los deportistas de base”, como apunta el colectivo espeleológico.
La nota añade que el GES-Priego tiene su origen en el año 1957; y durante estos 56 años de actividad, ha estudiado  cuevas y simas principalmente en las Sierras Subbéticas, amén de en otros puntos de la geografía española o del extranjero.
Por otro lado, el cerramiento de la cueva de la Murcielaguina, en el término municipal de Priego de Córdoba, por parte de Medio Ambiente, “sin contar ni tan siquiera con la opinión de los espeleólogos que trabajan en la zona,  y sin establecer un protocolo mediante el cual puedan continuar su actividad los espeleólogos prieguenses; hace que este grupo de espeleología pierda toda confianza hacia la política de Medio Ambiente”.
No es la primera vez que el GES-Priego denuncia mortandades masivas de murciélagos en cavidades de la Subbética; añadiendo en el comunicado que son antecedentes de estas denuncias las cuevas de Los Mármoles o de la Murcielaguina –ambas en el término municipal de Priego de Córdoba- y siempre, según los espeleólogos, “han apuntado al uso indiscriminado de insecticidas y pesticidas, sobretodo mediante fumigaciones aéreas”.
Finalmente la nota señala que la morfología de la cueva de Jaula, solo permite el acceso a la colonia de murciélago mediante el uso de la Técnica Alpina, “que nos lleva a una sala desde donde puede observarse el asentamiento de la antigua colonia de murciélago a unos cuarenta metros del suelo, sin posibilidad de acercamiento humano alguno”, añadiendo que la inaccesibilidad a la extinta colonia de murciélago, “refuerza la hipótesis del envenenamiento”.


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